Adolf Joseph Ferdinand Galland pertenecía al grupo de soldados que veían el combate aéreo desde la perspectiva de un clásico duelo. Su concepto de la guerra en el aire fue influenciado por el profundo respeto que le tenia a los héroes alemanes de la primera guerra: Richthofen, Immelmann y Boelcke. Era el duelo, no el matar o destruir, lo que se mantuvo siempre presente en este excepcional piloto.
Nacido en Westerhold el 19 de marzo de 1912. Desde niño sintió pasión por los aviones y desde los 12 años jugaba con aviones a escala. Tuvo oportunidad de volar en planeadores a temprana edad, lo que le revelo que su futuro estaba en volar aeroplanos. Cuando tuvo la edad necesaria, sabia que para conseguir su objetivo , tendría que ingresar a la escuela de aviación civil en Braunschweig, lo que logro en 1932, siendo uno de los 18 aceptados de 4,000 solicitantes. Se podría decir que su familia tenia el don de volar ya que dos de sus hermanos menores también llegaron a ser pilotos de combate, Paul fue derribado y muerto en 1942 con 17 derribos y su hermano Wilhelm también fue derribado un año después con 52 derribos y ganador de la Cruz de Caballero.
