martes, 6 de julio de 2010

¿Medidas absurdas?...vente a Ciudad Real

La ciudad manchega estrenaba el año pasado una normativa que limita actividades tales como correr o saltar en la vía pública, arrojar cera al suelo durante procesiones o conducir animales en grupo sin autorización del Ayuntamiento, actividades que de ahora en adelante estarán sancionadas con 75 euros.

Así lo dispone la normativa publicada el pasado 29 de junio de 2009, que también recoge medidas como la obligación de los restaurantes a serigrafiar sus servilletas, una iniciativa con la que se pretende perseguir aquellos hosteleros que no limpian sus terrazas.

No obstante, la concejala de Movilidad, Teresa Aguirre, ha reiterado recientemente que la polémica suscitada es consecuencia de "una mala interpretación" de la ordenanza.

Ya sabiamos de lo ridiculo de alguno de los pensamientos de nuestro querido ayuntamiento, o mejor dicho, nuestra excelentisima alcaldesa, pero la palma de todo se la vamos a dar al concejal de deporte porque lo cierto es que tiene un par de huevos. Si, damas y caballeros me pilla de rebote. El que te cobren 1,05€ por pasar a la pista de atletismo cuando de toda la vida ha sido gratis por deberse a que pertenece al polideportivo municipal y el deporte nunca ha sido polemica de nadie, ahora resulta que para echar un partido de futbol, tenis, o ir a correr a las pistas es preciso pagar. ¿es que con nuestros impuestos no es suficiente señora alcaldesa? si tan mal andan las arcas del ayuntamiento, ¿por qué no se dedica a cobrar a toda la chavaleria que se junta en determinada zona, supuestamente establecida para el botellón (que tambien pertenece al ayuntamiento, puesto que es el inem) ese 1,05€? de esa manera sacaria mucho mas para sus gastos publicos.

Estamos en crisis señora Rosa Romero, pero no somos gilipollas, asique rompa una lazane ne favor de la salud, como el deporte en esta ciudad y haga por otro sitio para sacar dinero, que parece que interesa mas tener a una juventud borracha y descuidada que una juventud sana y fuerte...menos mal, que en esta sociedad de borregos, nosotros preferimos ser lobos.